Nos hubiera gustado estar mas tiempo callejeando por Cármenes, cuya visita ya relatamos en nuestro blog:

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Nos hubiera gustado estar mas tiempo callejeando por Cármenes, cuya visita ya relatamos en nuestro blog:
Salimos en nuestra excursión de hoy por las hoces de Vegacervera adelante y nos hubiésemos quedado a medio camino, siempre sorprendidos por la belleza de este paisaje.
El escudo de la fuente tiene en el primer cuartel un castaño con dos calderos, en la segunda partición una torre, en la tercera tres flores de Lis, corresponde a los Ferreras. En el segundo cuartel hay un árbol a su lado dos cabras, corresponde a los Garcías. En el tercer cuartel, medio partido una torre, en segunda partición un árbol sobre el que se empina un animal, en la tercera partición dos aves posadas sobre barras, corresponde el apellido a los Getino. En el cuarto cuartel cinco flores de Lis, corresponde a los Argüellos. Este escudo viene de Almuzara.
Los Bayos, Villar de Santiago, Villablino... son pueblos bonitos, por el que pasaba, dirección a Villablino, Palacios del Sil y Valseco, en los años en que iba a trabajar, en mi coche 127 rojo, con mis dos hijos pequeños y dos compañeras maestras, los lunes por la madrugada. En aquellos momentos no había tiempo para conocer de cerca la configuración del pueblo y sus encantos, porque la carretera le bordeaba y sólo dejaba en nuestros ojos su estampa en lo alto del penedo, sobresaliendo su iglesia, apretujada por las casas circundantes.
Pero ahora sí ha llegado la ocasión y por eso hemos ido a visitar uno a uno los pueblos de la carretera que se llamaba entonces la de Caboalles y yo creí que ese pueblo estaba cerquita de la capital. Mira tú, resultó ser el final, ya en las proximidades de Asturias...
Aquí dejamos nuestro reportaje y sus fotos, empezando por el pueblo de los Bayos:
https://www.flickr.com/photos/rsas0010/albums/72177720296182107
Qué descriptivo es el nombre los Bayos, que hace alusión a los muchos caballos que debió de dar esta tierra de praderas inmensas, pues esta palabra significa el pelaje del yeguarizo, de color claro, que va desde el gris amarillento hasta el amarillo pálido.
Para iniciar el paseo logramos encontrar una referencia en el libro del Padre César Morán, en la Pág. 78 de su libro “Por Tierras de León” que escribe divertido, que no se pronuncia “Los Bayos” ni “lus Bayus” sino que hay que hacerlo en un término medio entre la O y la U.
Así que nosotros: ¡ale, a practicar por el camino! Y practicando, practicando...
Nos servía para reflexionar sobre el habla de nuestra montaña, que yo conocí al iniciar mi carrera de maestra en Valseco y después en Palacios del Sil. En aquellos tiempos coleccionaba las palabras y los giros gramaticales, que oía en el pueblo, en las tiendas, en los bares, con las que compuse un Vocabulario, que aporté al profesor Morala, en las clases de Lingüística, en la Facultad de Filosofía y Letras, donde seguía mis estudios.
Estas montañas han sido capaces de mantener la antigua lengua del Reino de León, el asturleonés, con su musicalidad y abundancia de tantos términos próximos a las labores del campo, la ganadería, las fiestas y tradiciones. Tuve la suerte de conocer a Eva González y a su hijo Roberto, comprar sus libros dedicados y disfrutar de su compañía y amistad.
Os dejo una muestra de sus poesías en estos versos:
"¡Oh Virxen de Carrasconte!
Oh Virxen Carrascuntina
que entre Tsaciana ya Babia
tienes tua ilesia, tua armita..."
Tanta riqueza hay en esta lengua de nuestros antepasados, que la valoraron insignes lingüistas. Hoy se estudia, se canta en las fiestas populares, se conserva a través de Asociaciones y enseñándola en la Escuela.
Los terrenos de Los Bayos limitan con los de Peñalba de Cilleros y Quintanilla de Babia al norte y El Villar de Santiago al oeste, que también visitaremos hoy, después de comer en Villablino.
Pero antes, pasearemos por Los Bayos. Llegamos a lo alto del teso que hay en el pueblo: El Castiellu que es un castro labrado en la peña viva, desde donde se observa una perfecta panorámica del pueblo.
Al otro lado hay una cumbre que llaman Calabre.
La iglesia tiene un entorno muy arreglado, con el potro de herrar restaurado y una zona de carpa para las fiestas.
En esa iglesia nos gustaría contemplar en el retablo la imagen de San Bartolomé, que lleva un pellejo al hombro, un cuchillo en la mano y a sus pies un diablo amarrado con una cadena.
Bar-Tolomeo (hijo de Ptolomeo) también llamado Natanael (El regalo de Dios) – Relacionado con la flor de la vida, el subsuelo, acuíferos y cuevas. Sería interesante entrar en el pueblo para admirar un rosetón y buscar vestigios del Temple.
En las historias de Natanael casi siempre aparece Felipe, no nuestro amigo, sino el apóstol. Se le representa con un gran cuchillo, en alusión a su martirio, fue desollado vivo, por lo que es el patrón de los curtidores. También se le presenta sujetando un demonio con una cadena, era Astaroth, que vivía dentro de una estatua en un templo. Encadenó al demonio y consagró el templo a Jesús.
Callejeamos por las empinadas calles buscamos la casa del escudo, que se halla muy bien conservado.
Este escudo lo estudia Pío Cimadevilla en su libro “Repertorio Heráldico Leonés.1” Pág. 202 .
Puede datarse de finales del Siglo XVII o principios del XVIII. El primer cuartel se divide a su vez en cuatro partes, pertenece a los García. En el 2º vemos un águila a la española con bordura de 4 vieiras y doce aspas de San Andrés. Cadenas Allende atribuye estas armas a los Betanzos. La bordura lleva una leyenda NADIE DIGA GARCIA DE ARRIBA...
Para acceder a la antigua lechería tienen un puente recién restaurado. Quizá tienen intención de restaurar la lechería y en nuestro próximo viaje la veremos con otro aspecto muy diferente.
Ya se hacía la hora de comer, nos despedimos de Los Bayos y sus gentes.
A unos 600 metros del pueblo se encuentra la cascada de los fumos, que ya hemos visitado y cuyo relato podéis encontrar en este enlace:
http://rsas0010.blogspot.com/2021/04/cascada-de-los-fumos-en-los-bayos-leon.html
Seguimos la carretera que nos lleva al Villar de Santiago, a Rioscuro e hicimos parada en Villablino.
Ved aquí nuestro reportaje fotográfico de Villablino:
https://www.flickr.com/photos/rsas0010/albums/72177720296215180
Después de comer volvimos sobre nuestros pasos, para visitar el pueblo de Villar de Santiago.
En agosto del 2015 cuando caminábamos por el Viejo Camino de Santiago, Camino Olvidado, estudiando su recorrido histórico, siguiendo el relato de la peregrinación de Leodegundia en el siglo X, llegamos a Quintana Fuseros y a los pueblos próximos, S. Justo de Cabanillas y Cabanillas de S. Justo. En Quintana nos encontramos con un vecino, que nos dijo que él era de Villar de Santiago y hablando con él, supimos de la relación que tenía S. Justo, el patrón de estos dos pueblos, con el lejano pueblo suyo, el Villar de Santigo.
Dejamos constancia de esta revelación en los artículos que publicamos en el periódico de la Crónica de León y podéis leerlo en este enlace:
https://rsas0010.blogspot.com/2015/08/27-historiasquintana-cabanillas-en-el.html
Este es el párrafo de referencia:
Una bonita leyenda, la de un San Justo, autóctono de estos lugares, que viene a cuento del nombre de estos dos pueblos.La asociación cultural Xeitu ha publicado “Vida y milagros de San Justo del Villar...” una joyita bibliográfica del siglo XVI, de propiedad particular, cedida por una familia de la comarca de Luna. Isidro García Moya, párroco de Salce y autor del manuscrito, ensalza al eremita que realizó milagros en vida y después de muerto. Predijo el día de su muerte y llegada su hora las campanas de la iglesia tocaron solas, para que sus convecinos acudieran al sepelio. Entonces hallaron en su mano un pergamino que aseguraba que era hijo, nada menos que del rey de Persia, que al cristianizarse cambió su nombre en honor de Justo, el que con su hermano Pastor, fueron martirizados en Alcalá de Henares.Cansado de la vida disipada de la corte, se retiró como eremita en lo alto de la braña del Villar de Santiago, donde llevó una vida de santidad, instruyendo en la doctrina y ayudando a todos.El manuscrito tiene un interés añadido, pues muestra las palabras que se decían en aquella época, la indumentaria de la gente, sus costumbres y modo de vida.Caminamos charlando de esta curiosa historia recuperada y pensábamos... ¿cuántas más descansarán en los viejos baúles de nuestros pueblos?
Ved aquí nuestro reportaje fotográfico de Villar de Santiago:
https://www.flickr.com/photos/rsas0010/albums/72177720296186543
Después regresamos al pueblo de los Bayos para coger una carretera que nos condujo a Cabrillanes.
Pero antes paramos en Peñalba de Cilleros. Ved aquí nuestro reportaje fotográfico de Peñalba de Cilleros:
https://www.flickr.com/photos/rsas0010/albums/72177720296182707
Os diremos que “cillero” es una persona que tiene a su cargo guardar en la cilla los granos y frutos de los diezmos. La cilla es el sitio seguro para guardarlos.
Encontramos un escudo nobiliario en la fachada de una casa. Aquí se nos explica un poco su historia porque en 1518 Antonio de Quiñones Enríquez, hijo 2º del 3º Conde de Luna, fundó el Mayorazgo de los Cilleros incluyendo a todos estos pueblos en el mismo.
Como no era hora para visitar cumbres tan notables, nos conformamos con fotografiarlas en nuestro camino de regreso a la ciudad, sobre todo Las Ubiñas, que brillaban al sol poniente con reflejos rosados.
Para acabar, como en todo relato se espera algún cuento o leyenda, os contaremos una, que habla de un lugar.. un poco más lejos la cascada de los fumos, donde parece que se encuentra el Río de los Ladrones, terrorífico nombre, cuya historia nos insinúa el Padre Cesar Morán en su libro antes citado.
Es un sitio que llaman "la huerta de los frailes". Parece ser que no eran frailes, pero se lo hacían sólo a medias, por el día se hacían los santos y por la noche se dedicaban a robar y asesinar, hasta que los vecinos de esos pueblos de alrededor se unieron para poner fin a los desmanes. Acabaron encontrándoles en el pozo que llaman de “la matanza” muy cerca del río de los ladrones. Quizá se escabulleron en las aguas profundas y quién sabe a dónde irían a parar...