07 julio 2023

La Mata de Torrevieja y los chorlitejos

Ya os hemos contado en nuestro blog La Mata doradas playas de primavera, que cuando arrecia el calor, nos vamos una temporda a La Mata (o Torrelamata, Alicante, al lado de Torrevieja). 

Aquí además de combatir el calor, vemos a otros amigos y sobre todo cambiamos totalmente nuestras actividades habituales como por ejemplo de caminar por la mañana pasamos a hacerlo por las playas de l´Hortiguet, que nosotros llamamos “Playa paraíso” porque de un auténtico paraíso se trata.  Esta playa con dunas, administrativamente no pertenece a Torrevieja sino a Guardamar.

Caminando por sus playas podemos ver a personas, además del clásico baño, practicar snob board, otras, equitación, incluso se nos despierta la ocasión de comentar la mitología griega, mientras contemplamos las olas del mar o la fotografía junto a las dunas.

El efecto hipnótico de las olas junto a la arena nos traen el recuerdo del mito del nacimiento de Venus....Urano, el firmamento estrellado se casó con Gaia la tierra, que después de ser fecundada nacieron los titanes, los cíclopes, los gigantes... y como no le gustaban sus criaturitas, papá los mantuvo encerrados bajo tierra. A todo esto, dicen que Gaia estaba más que harta de su marido, por lo que “malmetió" a su hijo Crono, para librarse de su pareja.



Fue por la noche cuando Urano se acercaba con su luz para cubrirla, cuando Cronos con un contundente golpe de hoz cortó a su padre los genitales. Cayeron al mar convirtiéndose en espuma, que concentrada en una concha de madrépora, brotó Afrodita/Venus, la más bella entre las diosas. Los Céfiros soplando la transportaron hasta las playas de Chipre, desde donde se trasladó al Olimpo, ante la admiración general.



Muchas aventuras sucedieron en la residencia de los Dioses pero en la cristiana Edad Media habían sido casi todas olvidadas... Luego, un caballero alemán, Tannhauser encontró el Venusberg, una montaña con la cueva que contenía su hogar subterráneo. Estuvo el caballero allí un año, admirando la belleza de la Diosa, pero como cristiano devoto que era, marchó a Roma para que el Papa Urbano IV le absolviera. El papa Urbano le dijo que era más posible que su báculo floreciera a qué él fuera perdonado. El caballero se marchó muy triste, pero tres días después el bordón del Papa floreció milagrosamente. Corrieron prestos a buscar al hombre, pero este ya no estaba, se había marchado a Venusberg.

Después de admirar el blancor de las espumas, que no dejaban de acercarse a nuestros pies, mientras caminábamos por la orilla de este mar azul, un pajarito nos llamó la atención.



Dicen que los políticos miden la salud de las aguas playeras por las banderas azules concedidas por Europa. Aquí se consigue cada año, lo que siempre es un lujo y un acicate para el turismo. 

Pero yo, desde hace años siguiendo al naturalista Joaquín de Prada, hace tiempo que las identifico por un pajarito de caminar rápido: el chorlitejo patinegro. Son unas avecillas vivaces que corretean ante nosotros por la orilla de la playa, van detrás de la ola buscando pequeños crustáceos y parecen decirnos estas playas están limpias. Sus grandes enemigos son la contaminación y la construcción abusiva...



Qué bonitos pajaritos, siempre correteando al borde de las olas y volando en escapada cuando te acercas a ellos!. Cuenta Don Joaquín una anécdota que también me ocurrió a mí un año pasado, cuando al acercarme demasiado a uno de esos pajarillos se puso a ejecutar una extraña danza caminando en circulo captando mi atención, parecía como si tuviese un ala rota. 

Yo intenté ayudarla pero ella se alejaba poco a poco hasta que Rosi que venía silenciosa detrás de mi, para no asustar más al ave me dijo ¡mira! Señalando un poyuelo de chorlitejo camuflado en un hoyo de la arena.

Lo llevamos hasta las dunas donde creímos que estaría a salvo y quiero creer que este año nos lo encontramos ya adulto realizando a mi alrededor la misma danza del ala fracturada, pero por si acaso miré a mi alrededor y ¡bingo! 

Había un nido simplemente posado sobre la arena, a un metro escaso de donde me encontraba, los huevos presentaban unos dibujos que a mi se me antojaban una escritura ancestral y en 21 días saldrían los poyuelos con plumón, batiendo sus alitas al correr como pequeños avestruces, después durante otros 25 serían vigilados por los padres hasta volar libres. ¡que bella es la naturaleza, que tiernos con las crías, que amigables con nosotros después de conocernos! Observándoles aprendimos muchas cosas incluso a distinguir los machos de las hembras.



Nosotros vigilábamos el nido de vez en cuando, sin interferir la incubación, hasta que un día ya no había huevos, ni chorlitejos... ni nada. ¿Se los habría comido un depredador? Pensé asustado. No era así pues en la arena se distinguían unas huellas de patitas de ave, que seguimos pacientemente hasta que empezaron a sobrevolarnos dos chorlitejos adultos, que emitían claras señales de llamada, y por allí estaban correteando los tres poyitos.

Verlos moviendo sus alitas mientras corretean... no se puede describir, ni tampoco fotografiar porque son muy rápidos, pero es emocionante.


Finalmente marcharon para la zona segura de las dunas y nosotros continuamos nuestro camino junto a la playa queriendo creer que tenemos unos nuevos amigos...



Cada año les buscamos en las dunas y les observamos con cariño, cuando nos acercamos a ellos. Es una bendición esta playa llena de seres juguetones, que parece que ya te conocen y te hacen guiños con sus vuelos y carreras.




2 comentarios:

Unknown dijo...

Corría el mes de mayo y la luz primaveral reflejada en las limpias aguas de la playa invitaba a pasear. 7 km de agua y dunas se ofrecían ante mis ojos . No sé en qué momento me percaté de que numerosas bandadas de pajaritos jugueteaban entre las olas y la arena .
Nada me hacía pensar que meses mas tarde, paseando en compañía de dos extraordinarias personas, Rosi y Rafa, me contarían de la vida y costumbres de los chorlitejos, que no jugaban si no que buscaban diminutos crustáceos,arrojados por las olas . Eso y todo lo demás que cuentan en su blog.

Rosa Fadón dijo...

Luisa muchas gracias por tu comentario y por los elogios que nos dedicas.